Aproveché estas vacaciones para leer uno de mis libros pendientes: John Rawls. Consideraciones sobre el significado del pecado y la fe. Sobre mi religión, textos compilados por Thomas Nagel y editado por Paidós. Se trata de la tesis de licenciatura presentada en la Universidad de Princeton en diciembre de 1942, y de un breve texto (Sobre mi religión) en el que presenta la evolución de sus ideas religiosas.
La tesis de licenciatura de Rawls es, por demás interesante, y me gustaría en varios posteos tratar algunos de los aspectos que,a mi entender, permitirían una reflexión sobre la hermenéutica de la fe. En ella, el autor re-define el pecado desde una perspectiva social, en otras palabras, para Rawls la teología no entiende ya de la relación entre Dios y el Hombre, sino entre Dios y la sociedad, o mejor aún, entre Dios y las personas, porque, como explica, una persona no es un individuo. EN este sentido, la tesis es un verdadero desafío a las disciplinas que se derivan de la Teología: la eclesiología, la política y la sociología.
Me gustaría citar lo que él llama su propia “concepción del universo”:
El universo en su aspecto espiritual es una comunidad de personas que glorifican a Dios y están relacionadas con él. Por lo que podemos decir que Dios creó al mundo para establecer una comunidad así y que el fin hacia el que se dirige la creación es, precisamente, la formación de esa comunidad. El hombre pertenece a esa comunidad por el hecho de ser persona y la pertenencia a dicha comunidad es lo que distingue al hombre y lo que le separa y diferencia de las criaturas de la naturaleza. (p., 129)
No me gusta Rawls, me parece indecente citar en un sitio cristiano a un agnóstico como él. Se ve que este texto es de los primeros cuando ya estaba contaminado del liberalismo que lo llevó a apostatar.