Vengo comentando que hace poco descubrí a John Henry Newman. Después de mucho tiempo, me tomé el trabajo de leer con atención Apologia pro vita sua. Fue una experiencia extraña. Se ha dicho que al leer no solo nos encontramos con el autor, sino también con nuestras propias experiencias y lecturas previas. No leemos al autor de manera objetiva, sino a través del prisma de nuestra vida y nuestra historia intelectual. Al cerrar la última página, no pude evitar repasar mi propia evolución religiosa. Mis posiciones han cambiado con el tiempo. La rigidez que caracterizaba mis posturas entre 2006 y…
-
-
No sé con precisión en qué momento escribir dejó de ser un hábito y se convirtió en una necesidad. Tal vez cuando comprendí que la teología no era una disciplina, sino una forma de respirar. O cuando advertí que la Historia, bien entendida, no se estudia desde el pasado, sino desde una herida viva. Este blog no nace para debatir ni para entretener. Nace porque hay cosas que no puedo callar, y no porque sean mías, sino porque me atraviesan. Escribir aquí será algo entre la cátedra y el púlpito, entre la celda y el archivo. Dirigido a nadie en…
-
Hace poco redescubrí a John Henry Newman. Después de mucho tiempo, me tomé el trabajo de leer con atención Apologia pro vita sua. Fue una experiencia extraña. Se ha dicho que al leer no solo nos encontramos con el autor, sino también con nuestras propias experiencias y lecturas previas. No leemos al autor de manera objetiva, sino a través del prisma de nuestra vida y nuestra historia intelectual. Al cerrar la última página, no pude evitar repasar mi propia evolución religiosa. Mis posiciones han cambiado con el tiempo. La rigidez que caracterizaba mis posturas entre 2006 y 2009 se atenuó…