En el lento peregrinar del alma hacia la verdad revelada, ciertos libros se convierten en compañeros silenciosos, guías discretos cuyo influjo se deja sentir más en el espíritu que en la memoria inmediata. Tal es el caso del volumen que hoy deseo recomendar, bajo el signo de aquella exhortación paulina tan poco frecuentada como urgente: τῃ ὑγιαινούσῃ διδασκαλία (Tit 2,1) —la doctrina que da salud. Me refiero a Las escuelas teológicas de la Iglesia Primitiva, obra conjunta del Padre Jesús Ruiz Munilla y del entonces diácono, hoy Presbítero, Saúl Díaz Sánchez, ambos pertenecientes a la Iglesia Ortodoxa en América (OCA),…